miércoles, 8 de julio de 2009

EL HOMBRE MARCADO.

Otro de esos libros que escogí sin tener referencias previas. Simplemente me llamó la atención el argumento y decidí embarcarme en su lectura.

Es un libro fácil, le lectura rápida y argumento sencillo. Interesante el tratamiento que recibe la magia, aunque tampoco es que sea algo muy novedoso.

El argumento es sencillo. La humanidad está continuamente asediada por unas criaturas infernales que aparecen al caer la noche, hasta el punto de estar casi condenada a la extinción. La única manera de protegerse es a través de un antiguo sistema de grafos (runas), que generan una barrera mágica que impide que estos seres la atraviesen.

La única posibilidad de la humanidad radica en protegerse, mientras que los demonios campean a sus anchas... y hasta aquí puedo leer.

Por lo que tengo entendido, el autor Peter V. Brett, es un escritor de nueva hornada. Esperemos que nos deleite con grandes novelas. De momento, su ópera prima parece ser que ha tenido muy buena acogida a nivel mundial. De todas maneras, huele a trilogía cuanto menos.


martes, 7 de julio de 2009

Jonathan Strange y el Señor Norrell.

Hoy voy a hablar de un libro que leí hace tiempo ya, pero que bien merece una pequeña reseña.
Este libro es uno de esos libros que llegó a mi porque sí. En una tarde de búsqueda azarosa en la librería de turno, estaba él ahí, quietecito en la estantería hasta que pasé por delante de él y de un salto cayó en mis manos. Bueno, no pasó así exactamente, pero eso no importa.
El caso es que me lo llevé sin más. Me enfrasqué en su lectura sin saber lo que me iba a encontrar. Con la mente despejada y abierta, preparado para dejarme sorprender.
La verdad es que creo que la mejor manera de leer un libro es sin saber nada acerca de él. Así uno no se crea ideas previas, ni crea prejuicios que sesguen la lectura.
Cuando uno lleva cierto tiempo leyendo libros categorizados como "fantásticos", es dificil encontrar algo que sorprenda, pues parece que ya todo está inventado y siempre nos recuerdan a otros libros escritos previamente.
Pues bien, con este libro me llevé una sorpresa. Cierto es que en ocasiones se hace algo aburrido y pesado. Hay veces que la historia fluye de manera coagulada, pero en general el relato está bastante bien construido.
La autora ha sabido fundir como pocos la historia con la magia y el floclore inglés, para crear una novela muy consistente y, salvando las distancias, realista.
La historia sucede en la inglaterra decimonónica y cuenta las aventuras y desventuras de dos estudiosos de la magia, que buscan la manera de hacer que vuelva con todo su esplendor. A estos personajes de ficción se irán añadiendo otros histróricos con gran profusión de detalles, que hará la historia mucho más rica y profunda.
Un libro original y recomendable donde los haya.
Título: Jonathan Strange y el Señor Norrell
Autor: Susanna Clarke

Disfrutadlo, que merece la pena.

miércoles, 1 de julio de 2009

LA NEBULOSA DEL TIEMPO.

Hoy me he puesto a pensar, y cuando me pongo a pensar, malo.
Reconozco que es más fácil dejarse llevar por el día a día, enfrascarse en las tareas cotidianas, cumplir con tus obligaciones y aquí paz y después gloria, que intentar reflexionar o pensar, cualquiera que sea la temática con las que entretener a nuestras anquilosadas neuronas.
Andamos siempre justos de tiempo para todo, y tras un día duro de trabajo, lo que más nos apetece es relajarnos y disfrutar del momento. Sin complicaciones. Sin trabas. Sin pensamientos molestos.

A todo esto contribuye (y de que manera), nuestro bienamado estado de bienestar, que nos da todo tipo de comodidades para que evitemos pensar por nosotros mismos.

La Tv, por ejemplo, se encarga de esto con bastante eficacia. Alguien se encarga de pensar por nosotros, de darnos las ideas y los razonamientos, de posicionarnos, de hacernos tomar una actitud ante la vida, y todo ello sin despeinarnos siquiera. Nos sirve un modelado en bandeja que no rehusamos y que incorporamos de manera inconsciente a nuestros esquemas mentales.

En fin, que me empiezo a ir por los cerros de Úbeda y no es esa mi intención.

Hoy pensaba en algo menos trascendental, quizás un tanto superficial. He empezado a recordar ciertas caras, rostros de personas que a lo largo de mi vida se han cruzado en mi camino. Gente con la que he compartido cosas, más o menos intensas, voluntaria o involuntariamente.

Me han venido recuerdos de la infancia, compañeros de esos primeros años de escuela. Gente en la que hacía muchos años que no pensaba, perdidas en la nebulosa del tiempo. Atrapadas en mis redes memoriales.
Personas, todas ellas que al igual que yo tendrán sus miedos, sus anhelos. Compañeros, amigos que un día lo fueron, cuyas vidas habrán evolucionado hasta vete tú a saber dónde.
Y es que cuando uno empieza a tener cierta edad, la suficiente como para tener un buen recorrido a sus espaldas, es lógico que ciertos recuerdos afloren. Al fin y al cabo se trata de la propia experiencia vital de cada uno y a modo de historia va quedando grabada en la memoria, con personajes que van y vienen.
Es curioso pensar que aquellas personas con las que un día compartes tu vida, puedan desaparecer de ella sin más. Pero así es la vida. Espero que a todas esas personas que un día se cruzaron en mi camino les vaya bien. De momento están ahí, prendidos en la nebulosa del tiempo, cada vez más espesa y profunda.